O lo que tu quieras
La pregunta no es si quieres joder o bien número El inconveniente que veo es que eres gordo, asqueroso y fumas. Debo deseas follar. El problema para mí es si mereces o bien no ser follado o bien si eres digno de ello.
Una mujer frígida puede pasarse toda su vida sin gozar del éxtasis sexual con su compañero. Muchas mujeres frígidas podrían ser excelentes compañeras sexuales a condición de que su pareja sea un hombre paciente y que la ayude lo bastante como para lograr un orgasmo.
Mas nuestro más grande mérito es, que supimos dirigir nuestro destino transformándonos en el seductor que anhelaban. Y de este modo cumplimos los requerimientos que deseaban para ser los elegidos. Los que son demandados incesantemente.
Fuera bromas, he decidido que haré mi trabajo de final de carrera sobre estos por el hecho de que están llenos de simbología, de la más fácil a la más segrega y enrevesada. Siento curiosidad por la necesidad del humano de dejar un mensaje para la eternidad, mediante textos o bien de símbolos.
Con todo ello, los flashbacks y los diálogos internos, se produce un estado sensible en el que prevalecen la ansiedad, la culpa, la ira, la saña, la hostilidad, en ocasiones la vergüenza, y con mucha frecuencia la tristeza e inclusive la depresión.
Esto se debe a que la velocidad de movimientos y la pasión que uno puede poner, siempre y en todo momento es diferente a la del otro, con lo que es realmente difícil hallar una canción en la que los 2 os mováis conjuntamente conforme las notas.
Soy una acompañante independiente que se amoldará al ritmo que desees, puedo ser suave, fuerte o una mezcla intermedia.
Son muchas las personas que nos consultan acerca del Punto G, en la mujer, y de qué forma pueden encontrarlo. También nos consultan si es verdad la existencia de dicho punto o, por contra, si se trata de una nueva fórmula publicitaria.
Mas eso es suficiente de las cosas físicas. Siempre trato de sugerir formas internas de tratar nuestros problemas, pues la mente es donde estos son los más fuertes. Si podemos resolverlos en la fuente, es considerablemente más simple manejarlos en el exterior.
Tampoco me hacían gracia las películas en las que las chicas aguardaban LA llamada: miraban fijamente al aparato, verificaban si estaba enchufado y se pasaban llorando el resto de tiempo. Y, sobre todo, no llegaba a hallar el motivo por el cual nunca llamaban ellas.
